Canon EF-S 55-250mm f/4-5.6 IS STM

El Canon EF-S 55-250mm f/4-5.6 IS STM es uno de los teleobjetivos con mejor relación calidad-precio dentro del mundo Canon. Aunque pertenece a la gama baja-media, ofrece un rendimiento óptico que sorprende, especialmente si se compara con teleobjetivos de gama alta que cuestan varias veces más.

Calidad óptica y nitidez

La nitidez que ofrece este objetivo es excelente para su categoría.

Incluso a su apertura máxima de f/5.6, el rendimiento es bastante decente, especialmente en la parte teleobjetiva (200–250 mm). Con buena luz y técnica adecuada, las imágenes pueden ser realmente nítidas.

Ligero, pero delicado

Una de sus grandes ventajas es el peso ligero, debido a su construcción en plástico.

Esto incluye también la montura, lo cual lo hace un poco más delicado que objetivos con montura metálica. No obstante, con un cuidado adecuado —no golpes, no cargar la cámara solo del lente, evitar torsiones— no debería representar ningún problema en el uso diario.

Estabilización de imagen (IS)

El sistema de estabilización es excelente, especialmente considerando su gama.

Esto ayuda muchísimo cuando se trabaja con largas distancias focales, donde cualquier vibración se amplifica.

Además, en video el estabilizador ofrece un resultado muy suave, aunque genera un leve sonido típico de los sistemas IS. Este sonido no afecta la grabación si se usa un micrófono externo, que es lo recomendable en cualquier situación de video.

¿Para qué tipo de fotografía sirve?

Este objetivo es muy versátil y funciona muy bien para:

• Fotografía de sujetos lejanos (naturaleza, deportes, aves, viajes)

• Retrato, especialmente en el rango de 85–135 mm

• Fotografía urbana desde distancia

• Video, gracias al enfoque STM y el estabilizador suave

Su distancia focal permite comprimir la perspectiva y aislar muy bien al sujeto, lo cual es perfecto para retrato creativo.

Consideraciones técnicas al usar teleobjetivos

Como con casi todos los teleobjetivos, es recomendable usar velocidades de obturación altas para obtener la máxima nitidez.

Esto implica que, en ciertas situaciones de poca luz, será necesario subir el ISO, y ahí la calidad final dependerá del cuerpo fotográfico utilizado.

Las cámaras con mejor rendimiento en ISO alto permitirán exprimir aún más las capacidades de este objetivo.